Si comprendemos lo que es el dolor ante la muerte de un ser querido, podremos entender todos los demás duelos de nuestras vidas.

Toda pérdida es un dolor. ¿Qué va a provocar más dolor la muerte de una persona amada o la muerte de un animal amado? El Dolor Mayor es el que Yo Sufro. Sea que haya perdido una perrita, sea que haya perdido a una persona amada. No hay termómetro, no hay reloj. El Mayor Dolor es el que Yo Tengo.

(Alfonso Reyes Zubiría - Tanatólogo Mexicano)

Los Counselors Bicheros acompañamos a personas que sufren por el cuidado, la enfermedad o muerte de sus animales porque a veces parecería que, para algunas personas y profesionales de la ayuda, el dolor por la pérdida del animal no fuera tan importante. Y esto provoca una gran tristeza por ese ser querido. Un ser que en muchos casos, y cada vez más, es la única compañía atenta y amorosa de las personas.

Primera Entrevista Sin Cargo.

counselorsbicheros@yahoo.com.ar

Counseling para ayudar a las personas a lidiar con el impacto emocional de la pérdida del animal

La gente forma lazos emocionales con sus animales, y ese vínculo puede llegar a ser muy profundo y diferente del que se forma con la gente. Como señaló Cowles (1985) la importancia de los animales de compañía como figuras de apego fue reconocido hace poco tiempo por la comunidad científica. Los animales pueden ser una fuente de amor incondicional y apoyo, confort, seguridad y estabilidad. En los casos en que una persona se siente desplazada tanto física como psicológicamente de vínculos o relaciones humanas, estos atributos de relación con un animal pueden ser especialmente significativos. Es importante entender que el apego a un animal facilita la posibilidad de relacionarse con otras personas (Quackenbush, 1982).

La pérdida de un animal de compañía puede tener un grave impacto en el bienestar físico y emocional de su familia (Katcher y Rosenberg, 1979; Quackenbush y Glickman, 1984; Thomas, 1982). Tras la muerte de un animal, muchos de sus familiares experimentan una interrupción significante en los patrones de alimentación y sueño, así como también en las actividades sociales (Quackenbush y Glickman, 1983). Aunque el dolor por la pérdida de un animal puede ser tan intensa como la pérdida de un ser querido, es probable que la importancia de la pérdida del animal doméstico no sea reconocida del mismo modo. El duelo puede incluso ser visto como una respuesta inadecuada a la pérdida de un animal doméstico (Cowles, 1980). Las personas que experimentan la pérdida de un animal puede que no reciban el acompañamiento y el apoyo de los demás.

Los Counselors pueden intervenir para ayudar a las personas a lidiar con el impacto emocional de la pérdida del animal doméstico de varias maneras. Los diferentes roles, tanto directos como indirectos, que los Counselors pueden realizar generalmente se dividen en tres categorías: (1) Counseling para los que tienen animales de compañía en duelo o desconsuelo, (2) consulta con los profesionales de la medicina veterinaria y otras personas involucradas en el cuidado de la salud animal, y (3) la investigación.

Fuente: Pérdida de Animales de Compañía: la competencia de los Counselors- Bruce S. Sharkin y Audrey S. Bahrick

Nota a los Equipos Veterinarios, Auxiliares, Pet Shops, Refugios y Personas que Aman a los Animales de cualquier especie

Nos dirigimos a ustedes para ofrecer nuestro servicio de Counseling orientado a contener a las personas que sufren por los animales ante su pérdida o enfermedad.

Los Counselors somos profesionales de la ayuda que acompañamos y escuchamos a las personas en crisis, en la toma de decisiones, y también en situaciones de duelo, tristeza y confusión.

Ayudamos a expresar libremente cada sentimiento que surja, ya que no siempre el entorno comprende. Frases bien intencionadas como “Ya tendrías que haberlo superado, ¡es sólo un gato!” o “¿te parece gastar tanto en un perro?”, provocan más angustia que consuelo.

Los tiempos del Counseling suelen ser breves; en nuestras entrevistas nos centramos en las emociones de las personas porque, muchas veces, la muerte o enfermedad de un ser querido animal también se conecta con otras pérdidas de la vida.

Clr. Patricia Baioni y Clr. Angie Díaz